
KUGA
El Kuga híbrido combina un eficiente motor diésel Duratec de 2,5 litros con una batería híbrida para aumentar el ahorro de combustible y reducir las emisiones en distancias cortas.
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Los vehículos híbridos (FHEV) combinan una batería híbrida con un motor de combustión convencional para aumentar la potencia y mejorar la eficiencia. La batería se carga a medida que conduces gracias al frenado regenerativo.
Los vehículos híbridos tienen menos autonomía eléctrica que los híbridos enchufables, pero son capaces de recorrer distancias cortas solo con energía eléctrica a baja velocidad. Son ideales para desplazamientos cortos por la ciudad.
La conducción sin emisiones a baja velocidad reduce el impacto medioambiental, así como los costes de funcionamiento.
No hay necesidad de buscar un punto de carga, ya que el frenado regenerativo carga la batería durante la conducción.
La capacidad de conducción eléctrica en distancias cortas ayuda a reducir el coste de combustible.
Los vehículos híbridos cambian de forma fluida entre los distintos modos de conducción para circular solo con el motor de combustión, solo con la batería o combinando ambas fuentes de energía, según las condiciones de conducción.
A bajas velocidades y al circular con paradas y arranques frecuentes, la batería suministra electricidad solo para distancias cortas y proporciona un par adicional. Durante la conducción normal, complementa el motor para ahorrar combustible. El frenado regenerativo carga la batería para ampliar la autonomía de conducción eléctrica.
Cuando se necesita más potencia o si la carga de la batería es baja, el motor de gasolina toma el control.