Un Ford Ranger Raptor, un cocinero y unos ingredientes para su “plato estrella” que no están precisamente al alcance de la mano (no es tan sencillo como ir al súper). Estos son los componentes del reto que la marca ha planteado a distinguidos chefs de toda Europa, con el nombre de “Eat My Dust”.
Cada uno de los protagonistas (ahora hablaremos de ellos) tenía que crear una receta e incluirla en su menú, pero con la condición de que los ingredientes fueran locales y originales. Para encontrarlos, contaría con la ayuda del pick up más “bestia” de Ford, pues en la mayoría de las ocasiones la “materia prima” estaba en lugares aislados, a los que era difícil llegar. ¿Cómo se las apañaron para superar el reto y cuál fue el resultado? Sigue leyendo…
Javier Álvarez, Krápula
Para su plato, bautizado como “Muerde el polvo: atún salvaje 4x4”, Javier ha utilizado diferentes cortes de atún de almadraba, método de pesca sostenible con 3.000 años de antigüedad, que ha combinado con un polvo elaborado a partir de higos deshidratados procedentes de la Sierra de Gredos.